En las vísperas de la Semana Santa, tiempo de reflexión, entrega y fe, la ciudad de Jerez vivió ayer un momento histórico en el Colegio Salesiano Manuel Lora Tamayo. Se constituyó por primera vez el Consejo Local de la Familia Salesiana de Jerez de la Frontera, un hito que consolida la unidad, el carisma compartido y el deseo de seguir haciendo presente a Cristo en los ambientes juveniles, especialmente entre los más necesitados.
Convocados por el director del centro anfitrión, D. Eduardo Arduña Lafora (SDB), y con la presencia de los directores de las cuatro casas salesianas de la ciudad, acudieron representantes de los principales grupos que conforman esta gran familia: ADMA, Antiguos Alumnos, Hogares Don Bosco, Salesianos Cooperadores, Salesianos de Don Bosco (SDB)y Salesianas de María Auxiliadora (FMA).
Jerez, ciudad profundamente marcada por el espíritu de Don Bosco, cuenta con cuatro presencias salesianas que, desde hace más de un siglo, llevan adelante su labor evangelizadora y educativa en todos los puntos cardinales de la ciudad: el Colegio Salesianas Don Bosco, el Oratorio Festivo Torres Silva, el Colegio Manuel Lora Tamayo y el Colegio Salesianas María Auxiliadora. Algunas de estas casas, plantadas en barrios obreros y zonas económicamente desfavorecidas, son faros de esperanza que siguen apostando por la juventud, con el carisma alegre y cercano que caracteriza la obra salesiana.
Este primer encuentro del Consejo Local fue presidido por D. Luis Fernando Álvarez (SDB), coordinador inspectorial de la Familia Salesiana, quien además acudió como representante de las AADDMA del Oratorio. En su intervención, D. Luis Fernando subrayó la necesidad de caminar juntos, de fortalecer los lazos entre los distintos grupos y de trabajar en sinergia para que el sueño de Don Bosco siga vivo en nuestra tierra.
La sesión también contó con la elección del secretario del Consejo, recayendo dicha responsabilidad en D. José Antonio Aguilar Valle (ACS), docente y miembro activo del equipo de pastoral del Oratorio Festivo, que asumió el cargo con ilusión y entrega.
¿Por qué es tan importante esta iniciativa?
La constitución de este Consejo Local no es un mero trámite organizativo. Es una respuesta evangélica y carismática a los desafíos de nuestro tiempo. Es decirle al mundo que la unidad no es solo un ideal, sino un compromiso real. Es crear puentes entre realidades distintas que comparten un mismo corazón: el amor a los jóvenes, a la Iglesia y a Don Bosco.
Este Consejo nace con una clara vocación de servicio: coordinación, animación y formación conjunta. Pero también con una mirada profética, sabiendo que la misión evangelizadora del carisma salesiano no puede hacerse de forma aislada, sino en comunidad, como una gran familia que camina unida.
Mirando al futuro con esperanza
La próxima reunión en el mes de junio será el siguiente paso en este camino recién estrenado. De aquí saldrán propuestas conjuntas, proyectos interobras, celebraciones comunes y, sobre todo, un testimonio fuerte y claro de que Dios sigue hablando a través del espíritu salesiano en nuestra ciudad.
En palabras de Don Bosco: “Dios nos puso en el mundo para los demás”. Y eso es precisamente lo que este Consejo quiere hacer: poner a Jerez en modo familia, con la fuerza del Evangelio y la alegría del carisma.
Que María Auxiliadora, Madre de la Iglesia y Estrella de nuestra Familia, guíe este camino de comunión y nos conceda la gracia de seguir soñando y construyendo juntos el Reino de Dios en el corazón de la juventud jerezana.