El pasado jueves 3 de abril, toda nuestra comunidad educativa se unió en una emotiva jornada solidaria dentro del marco del tiempo litúrgico de Cuaresma. Con el corazón abierto y el espíritu salesiano bien presente, celebramos la campaña “Bocadillo Solidario”, una actividad que, más allá de compartir un simple desayuno, nos permitió compartir compromiso, generosidad y esperanza.

Durante la mañana, el alumnado del centro tuvo la oportunidad de colaborar comprando un bocadillo para el desayuno. Lo recaudado en esta acción se destinará íntegramente a apoyar la labor de la ONG Bosco Global, que actualmente trabaja en la emergencia provocada por el devastador terremoto de 7,7 grados que ha sacudido Myanmar. Esta tragedia ha dejado más de 1.000 fallecidos y 2.300 heridos, afectando profundamente a la comunidad salesiana de Anisakan y a numerosas familias que han perdido todo.

Desde nuestra salesiana, quisimos aportar nuestro granito de arena, sumándonos a esta causa que nos interpela como cristianos y educadores. En un mundo necesitado de gestos de fraternidad, la Cuaresma nos invita a mirar más allá de nuestras fronteras y abrir el corazón al dolor del otro. Y, una vez más, nuestra comunidad ha respondido con entusiasmo, empatía y solidaridad.

Gracias a todo el alumnado, profesorado, familias y personal del centro que hicieron posible esta jornada. Porque cada bocadillo compartido fue, en realidad, un abrazo enviado a miles de kilómetros.